Rita y Diogo acudieron a nosotros con una idea firme de lo que querían: combinar la delicadeza con una invitación floral.

A la vista de este encargo, el desarrollo del diseño de este proyecto se centró en el uso del verde, el blanco y el dorado.

La delicadeza del diseño floral combinada con la sofisticada combinación de elementos tipográficos en un estilo clásico dio como resultado una identidad visual agradable, elegante y entrañable.

El monograma de los novios se creó con sus iniciales, envueltas en un arco floral a base de hojas de olivo en varios tonos de verde.

Para presentar la invitación de boda personalizada se eligió un sobre verde menta, para que se acercara a los tonos verdes de las hojas.

Toda la invitación y la papelería seguían la misma identidad visual, por lo que fue posible utilizar flores y follaje en acuarela para suavizar los elementos en todas las piezas de la boda. Su acabado destaca por el brillo del papel y la lámina dorada bajo los elementos textuales, así como el color verde.

Además de la invitación de boda, Rita y Diogo confiaron en Pergaminho para desarrollar toda la papelería del día de su boda. Se mantuvo toda la identidad a la hora de crear los marcadores de mesa, el seating plan, el menú y la lágrima de la felicidad en lugar del tradicional misal. La pareja eligió marcar la diferencia optando por la lágrima de felicidad, que se presenta en su interior con un pañuelo para los más emotivos durante la ceremonia. Acompañando a este pañuelo, el producto personalizado encanta con la frase "Si es para llorar, ¡que sea de alegría!", que derrite el corazón de los más atentos.